Que rápido ha pasado el año.
Como para todos vosotros, ha sido un año repleto de acontecimientos, unos más importantes que otros. De actividades, unas lúdicas, otras personales y profesionales.
Para poder disfrutar de una vida satisfactoria, deberíamos aprender a vivir la vida, sin distinción entre las actividades, sean éstas personales, de ocio o profesionales.
Es habitual extresarse cuando hay un exceso de actividades tanto personales como profesionales.
Hacer muchas cosas, a veces, si no las tenemos bien interiorizadas o no tenemos una disciplina trabajada, nos puede hacer sentir extresados.
Para evitar esa sensación, lo mejor es amar lo que uno está haciendo en cada momento. Ofrecer nuestras acciones a los demás, para que ya sea nuestra familia, amigos o compañeros, se beneficien de nuestro trabajo.
Ser feliz ayuda mucho a ayudar a los demás a que lo sean, pues difícilmente daremos lo que no tengamos.
Un abrazo para todos y que tengáis unas Felices Fiestas en compañía de vuestros seres queridos.
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